Transformación empresarial

La empresa de mis sueños



Lo que inicia como una aventura, se puede convertir en una pesadilla.

Aunque con sus peculiaridades, parece que la historia es la misma: decidimos iniciar un negocio aprovechando una oportunidad, un capital o una habilidad. Y aunque algunos logran tener éxito, la mayoría no prospera. 

Llegan más ventas, más entregas y más problemas… Entonces contratamos gente, locales, compromisos. Y lo que inició como una aventura, se convierte en una pesadilla. 

Y es que iniciamos con un sueño pero no con una preparación apropiada.


¿Qué debemos tener claro para triunfar en nuestro avance emprendedor?


LAS 4 LIBERTADES DEL EMPRESARIO


“El precio a pagar sólo se justifica por su beneficio: vivir con libertad, libertad empresarial” 
  1. Libertad financiera. Significa obtener ingresos suficientes para vivir con un estilo y calidad de vida superior al promedio. Tener dinero es tener opciones. También, significa crear una fuente de ingresos pasivos que garanticen un futuro digno.
  2. Libertad de tiempo. Es tener el control de nuestra agenda y la capacidad de escoger nuestras actividades. Un empresario exitoso destina gran parte de su tiempo a actividades de recreación y renovación.
  3. Libertad de propósito. La capacidad de decidir qué contribución hacer a la sociedad, cómo podemos ser parte de la solución y no del problema.
  4. Libertad de relaciones. Es poder determinar con quién queremos trabajar, sea clientes, colaboradores, etc.


EL SENTIDO DE MISIÓN

“Una cosa es trabajar por comisión, y otra trabajar por misión.” 

Determinar la misión de tu empresa permite enfocar los esfuerzos a un problema del mercado que nuestro producto o servicio puede resolver de manera eficiente y rentable. 

Las empresas que han sobrevivido a los diferentes avances tecnológicos son aquellas que se identifican con un problema y no con un producto. 


La enseñanza de Kodak y Blockbuster

Kodak se casó con las cámaras fotográficas y no con el problema de cómo guardar recuerdos; Blockbuster se casó con películas y videocassettes y no con el problema de cómo tener entretenimiento familiar con variedad y sencillez, etc.


UNA VISIÓN DE ÉXITO

La parte más desafiante para lograr la libertad empresarial, es la visualización de la empresa que será capaz de cumplir nuestra misión y producir la libertad buscada. 


¿Negocio o empresa?

Negocio

Depende de una persona (usualmente el dueño) para su éxito o su sobrevivencia. 

Empresa

Es una organización rentable que funciona bien con su dueño, sin él… ¡o, a pesar de él!


Los 3 elementos básicos

  1. Una estructura organizacional: ¿quién hace qué?
  2. Un equipo humano: a quién subir al camión, a quien bajar, y dónde sentar a cada uno
  3. Una estrategia clara: cómo pensamos llegar al objetivo


Los principales indicadores de éxito 

Hay muchos indicadores que cuidar para mantener la salud de la empresa. Pero, tal vez los que deben gobernar nuestra atención y esfuerzo, son: 

  1. La rentabilidad (que haya utilidad después de cumplir compromisos) 
  2. La sustentabilidad (que se mantengan los beneficios consistentemente)
  3. La escalabilidad (la capacidad de crecer con relativa facilidad)


PLAN DE ACCIÓN

Si eres empresario, hay tres cosas que puedes hacer desde ahora para construir la empresa de tus sueños:

1. Elige la libertad empresarial como tu motor de éxito. 

- Planea sesiones de vacaciones y renovación cada vez más largas. 

- Prepara a tus colaboradores para que tomen decisiones y resuelvan problemas que te liberen del día a día y te permitan disfrutar de tus esfuerzos.

2. Descubre tu ¿por qué? 

Que la definición de tu misión no sea un cuadro en la pared, sino una razón de tu existencia y de tu paciencia. 

Pregúntate: ¿Qué problema es nuestro problema? Sé experto en la psicología del problema y en la técnica de tu producto. Que todos los miembros de tu empresa lo conozcan y lo abracen.

3. Diseña la empresa de tus sueños. Tómate el tiempo para hacer tu “organigrama maestro.” Determina cuántas personas y de qué perfil necesitas para cumplir tu misión con excelencia y eficiencia. Aparta tiempo de calidad para ello y no lo delegues.

¿Qué esperas para construir la empresa de tus sueños?